sábado, 15 de noviembre de 2008

Un sí a la vida.Una afirmación que durante un tiempo en mi vida no tuve tan firme,tan clara,pero que ahora se ha asentado en mí de una forma férrea.

Y opino porque creo en lo que defiendo, y este documento visual ayuda a entender las razones.
Salvo comentarios del actor respecto al supuesto racismo,(esta hablando de E.E.U.U) que no comparto del todo,lo demás lo ratifico.Son imágenes extremadamente duras,pero que después de verlas me han hecho pensar.En "ellos",en mis valores, en esas personas que enferman de cólera porque desean una muerte digna para los toros, esa norma que nos impone una multa elevada por matar a una especie animal o vegetal protegidas, y luego ambas realidades justifican una muerte de un ser indefenso. Hay veces que juro no entender el punto al que hemos llegado.Espero que no tardemos en reducir de marcha .

Sé que no todo es blanco o negro,no es fácil ;sólo pido que abramos los ojos a otras opciones,las hay, y menos traumáticas.Y en los casos en que se pueda, prevención ,que en el 2008 hay medios, ¿no creéis?

Me contestaréis:

¡Pero si un embrión todavía no es una persona,son sólo células coño,no siente!.
Para mí empieza a existir desde el momento de unión de las dos células,lo que viene después es mero perfeccionamiento, desarrollo.Yo no se cuando empieza a sentir,¿alguien sí?.
No convence, ¿cierto?.De acuerdo, ante eso, el vídeo.

Y por favor, que nadie utilice la palabra demagogia.Aquí no.




1 comentario:

Laura dijo...

No es una cuestión de cifras. Ni tan siquiera una cuestión de salud.

Es la cuestión inherente al desarrollo, la evolución, la permanencia de la especie como Ser Social.

Nos resistimos a que nos consideren animales y sin embargo actuamos como tales.
El desarrollo ontogenético nuevamente se impone al filogenético cuando es éste el que nos constituye como Únicos.

Dónde va a ir a parar la Humanidad?
Dónde, la esencia

Si nos olvidamos de que la Certeza reside en la Educación estamos matando nuestra Consistencia.

Estamos... rindiéndonos al Fracaso mientras jugamos a Ser Dios.